El primer ministro sueco, Lofven, sigue siendo el favorito a pesar de perder su destitución

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        El primer ministro sueco, Lofven, sigue siendo la mejor opción del público a pesar de perder el voto de desconfianza

El primer ministro sueco, Stefan Lofven, sigue siendo el líder más popular del país, según una encuesta publicada el jueves, en medio de una crisis política en curso luego de una votación de desconfianza en el parlamento a principios de esta semana.

Una encuesta de Novus realizada a raíz del voto de desconfianza encontró que el 38% de los votantes suecos todavía tienen fe en Lofven, en comparación con solo el 35% que apoya a su rival de centroderecha Ulf Kristersson.

A principios de esta semana, Lofven se convirtió en el primer primer ministro en funciones en la historia de Suecia en ser derrocado por los parlamentarios de la oposición en un voto de desconfianza. Ahora tiene una semana para renunciar o convocar nuevas elecciones, después de que el Partido de Izquierda retiró su apoyo a su gobierno.

La medida empuja a Suecia nuevamente al caos político, solo dos años después de que una elección estancada resultara en meses de negociaciones antes de que se pudiera formar un gobierno de coalición.

Los socialdemócratas de Lofven habían sido apoyados en el gobierno por el apoyo del Partido Verde y el Partido de Izquierda más pequeños, así como por un acuerdo de confianza y suministro con el Partido del Centro. Sin embargo, el Partido de Izquierda se retiró del gobierno por una disputa sobre la abolición de los controles de renta en propiedades de nueva construcción.

Si bien Lofven podría haber perdido el apoyo del Partido de Izquierda, lo que significa que no puede asegurar el respaldo de más de la mitad del parlamento, su oponente Kristersson tampoco puede obtener el apoyo de la mayoría, lo que significa que es cada vez más probable que se celebren elecciones.

Si se convoca una elección, las encuestas de opinión muestran que el apoyo de Lofven ha aumentado un 2% en los últimos meses, mientras que el de Kristersson ha caído un 1%. Los liberales podrían estar a la altura del número de votos necesarios para asegurar los escaños, mientras que el Partido de Izquierda y los Demócratas de Suecia podrían ver aumentar sus votos.