Los animales han sido desde siempre parte importante de la existencia del hombre en la tierra, ya sea como compañía, como asistentes en diversos trabajos o extensión de los sentidos, y por supuesto, como fuente de alimento.
Algunos animales han sido domesticados, mientras que otros permanecen en su hábitat natural, muchas veces vulnerados por las actividades del hombre. Y unos cuantos todavía maravillan a quienes los contemplan.
Domesticación de las especies
Los seres humanos han cazado animales desde hace mucho tiempo, mucho antes de la formación de los primeros asentamientos permanentes. Con el tiempo, diversas plantas fueron cultivadas en lugar que esperar a que crecieran solas, dando origen a la agricultura. Y lo mismo ocurrió con una variedad de especies animales. La cría de cerdos, cabras, ovejas y otros fue poco a poco eliminando la necesidad de cazar en los diversos lugares del planeta donde la humanidad se había establecido, al igual que con diversos cultivos.
La distribución de ganado en diversas regiones del mundo llevó al desarrollo de determinados especímenes adaptados a condiciones ambientales específicas. Tal es el origen de la raza Angus Brangus, ejemplo de cómo el ingenio y la necesidad se unen para mejorar la economía en ciertas zonas del planeta como Sudamérica. Pero lo cierto es que su procedencia es de Escocia y provienen del buey Angus, el cual a diferencia del espécimen actual no podía adaptarse a las zonas montañosas. De cualquier manera, un rasgo a destacar de esta especie es su alto nivel de productividad en comparación con otros bovinos, además de ser bastante dóciles e inteligentes.
Extraños y en peligro de extinción
La variedad de animales que se desconocen son tantas, que resulta increíble comprobar el desconocimiento que se tiene sobre este aspecto. En cada rincón del planeta viven especies de las cuales ni siquiera se han escuchado sus nombres. Y así como sus nombres son extraños, lo es aún más su fisonomía. Conocer sobre los animales más raros es atractivo tanto para jóvenes como para los adultos. No obstante, es desalentador saber que un número significativo de ellos se encuentra en peligro de extinción por la invasión del hombre en su hábitat.
Por ello, entender sobre sus modos de vida repercutirá en generar conciencia sobre las acciones de los seres humanos para resguardar a estos animales. También reflexionar sobre la vida respetuosa y en armonía con el planeta.
Los perros también tienen su residencia
Hacer que la mascota se sienta como un huésped en un hotel 5 estrellas es posible en una residencia para perros Sevilla. Al igual que sus amos, las mascotas también deben disfrutar, sobre todo cuando los dueños deben alejarse por motivos de viaje. Por ello, en los hoteles caninos se sentirán cómodos, al estar instalados en espacios agradables y suficientemente amplios para el ejercicio y la socialización con otros perros.
También se prestan servicios adicionales como la peluquería y adiestramiento canino. Con estos servicios se sentirá mucho más mimado que en casa y se les devolverá el afecto y calidez que tanto se merecen. De esta forma alternativas como los servicios de cuidado para mascotas han encontrado su propio mercado.
Cuando los gatos no son bienvenidos
El número de gatos callejeros en zonas urbanas del mundo puede contarse por decenas de millones. España no está exenta de ello, y entre los males más visibles está la propagación de enfermedades y parásitos que pueden contagiar a otros animales e incluso a personas, razón por la que es conveniente saber como ahuyentar gatos callejeros.
Entre las incontables opciones se tienen desde arrojarles agua, hasta hacer ruido con papel de aluminio. Otras iniciativas pueden ser tener cerca de ventanas y espacios abiertos por donde puedan entrar, naranjas o cualquier otro fruto cítrico, ya que su aroma los espanta. Asimismo, puede optarse por simple y llanamente dejarlos de alimentar o mantener en el jardín ciertas variedades de plantas que los ahuyentarán, como la albahaca, el tomillo, los geranios o la lavanda. El jardín estará mucho más fragante y libre de gatos.